Breves apuntes sobre «El mal de Samsa», por Carolina Olguín

El título de este libro es ya una declaración de principios literarios: sabemos que el gran personaje de Franz Kafka es un motivo para ceñirse a la ficción literaria, a la fidelidad de contar historias, a la transformación que los seres pueden tener en cualquier momento en el mundo de la ficción.

En este libro de relatos, todos los personajes y las situaciones sufren de metamorfosis, en distintos niveles; de ahí que “el mal de Samsa” nos acompañe de principio a fin a los lectores. Nosotros lectores también nos transformamos, porque vivimos junto con los personajes y no volvemos a ser los mismos después de internarnos en las historias.

Tenemos una serie de cuentos en todas sus extensiones, brevísimos o de varias páginas, siempre y cuando se lean de una sentada, ésa es la máxima clásica del cuento.

En el relato “Leona”, mi preferido del libro, una mujer mayor, madura, solitaria… se transforma insólitamente, emocional, psicológica y espiritualmente, en una leona. ¿Cómo es esto posible? Sólo leyendo el relato, sus acontecimientos, y leyendo entre líneas también, podemos constatarlo.

Pregunté al autor si había una intención premeditada al poner como protagonistas a muchas mujeres en estos cuentos; me dijo que no, pero el hecho es que el mundo sensible y sensitivo femenino está muy bien representado, narrado y evocado en estos cuentos. Este es el caso de “El baño”, relato en el que una mujer se metamorfosea hasta convertirse en gotitas de agua mientras se baña; se fusiona con sus sensaciones, con el acto que está llevando a cabo, y se diluye… esto es relatado no sin cierto toque erótico pero muy sutil.

Muchos de estos cuentos tienen finales que oscilan entre la sorpresa y el humor. De hecho, el humor funciona para resolver, incluso a través del lenguaje, las situaciones absurdas que pueden suceder a los personajes. Porque también hay que señalar que, en eso, Tinajero también es kafkiano, en apuntar el absurdo que habita en la cotidianidad de nuestros días.

Hay cuentos que son microrrelatos y hay algunos que casi parecen aforismos. Por ejemplo, “Fábula”, en el que la transformación se da a nivel semántico, con el juego de palabras; el sentido se potencia yendo más allá de la reunión de dos refranes populares:

“Fábula”

Cría cuervos y échate a dormir. Crea fama y te sacarán los ojos.

(p. 83)

En el microrrelato “Mutación”, el personaje se convierte en una extensión de una moneda que él mismo recogió; se vuelve la moneda… En los microrrelatos, tan difíciles de lograr por el efecto que en pocas palabras deben suscitar, Renato deja ver su madera de cuentista y su tino al incorporar algo de fantasía, que permite dos lecturas de los cuentos: la de base, con los hechos tal y como son contados, y la oculta (como diría Piglia), aquella que puede interpretarse y comunicarnos algo más, que a veces es la más importante de las lecturas.

Sobre Carolina Olguín

Carolina Olguín nació en Monterrey, México, en 1978. Es poeta, profesora de lengua y literatura y editora independiente. Es autora de Canicular, poemario publicado en 2019 por Mantis Editores y el Fondo Regional para la Cultura y las Artes, y del Libro de la vigilia, publicado en 2014 por Abismos Casa Editorial. Estudió Letras Españolas y una maestría en Educación Superior con especialidad en lengua y literatura en la Universidad Autónoma de Nuevo León. Sus ensayos, reseñas, artículos y poemas han aparecido en las revistas Tierra Adentro, Letras Explícitas, Revista de la Universidad de México, Armas y Letras, Interfolia, Posdata, La Resolana de Nuevo León, así como en el diario Página Siete, de Bolivia y en la revista digital Letralia, de Venezuela, entre otros. Obtuvo el tercer lugar en el XXX Concurso Nacional de Creación Literaria del Tecnológico de Monterrey en la categoría de cuento corto. Ha sido becaria del Programa Financiarte, del Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León, y ha difundido su trabajo poético en festivales de México y el Caribe. Ha impartido charlas y lecturas sobre autores como Amado Nervo, Juan Rulfo, Omar Khayyam, Clarice Lispector, José Lezama Lima, entre otros. Fue parte de la mesa de redacción de la revista Armas y letras y coordinadora académica de la Capilla Alfonsina.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Funámbulo Librería – Editorial

Monterrey, Nuevo León, MX

Envíos a toda la República Mexicana

Sigue nuestras redes sociales

X
Add to cart